El Día Universal del Niño, que se celebra todos los años el 20 de noviembre, es un día dedicado a todos los niños y niñas del mundo. La Asamblea General de la ONU aprobó la Declaración de los Derechos del Niño en 1959. Es un día para celebrar las conquistas alcanzadas, pero fundamentalmente es una jornada para redoblar esfuerzos en pro de la infancia desfavorecida. En lo que se refiere concretamente a la educación queremos recordar desde el Centro Asturiano de Madrid que el derecho a la educación es reconocido por las Constituciones de los diversos Estados configurados como Estados de Derecho. Análogamente, procede recordar sumariamente que la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño (1989) en su artículo 28 reconoce el derecho del niño a la educación. En el artículo 29 se consigna que dicha educación debe encaminarse al desarrollo de la personalidad, las aptitudes y la capacidad mental y física del niño hasta su máximo potencial, y se agrega que se le ha de inculcar el respeto a sus padres, a su propia identidad cultural, a su idioma y sus valores, a los valores nacionales del país en que vive, al país del que sea originario y a las civilizaciones distintas de la suya. Continúa con la necesidad de preparar al niño para una vida responsable en una sociedad libre, con espíritu de comprensión, paz, tolerancia, igualdad entre los sexos y amistad entre los pueblos, grupos étnicos, nacionales y religiosos y personas de origen indígena, así como el fomento en el niño del respeto al medio ambiente natural. V. M-O.